<$BlogRSDURL$>

jueves, junio 23, 2005

Dia de verano 

El calor asfixiaba su piel húmeda, y nublaba su pensamiento. Solo quería encontrar un respiro en algún lugar fresco y tranquilo.
Saltaban dolorosas chispas cada vez que él se acercaba a su cuerpo. Era entonces cuando crecía su angustia, pensando que todo volvía a ser como antes, cuando el miedo la paralizaba. Esta sensación oscurecía su interior, le anudaba la garganta alimentando por momentos su deseo de llorar, y retorcía aun más los complicados caminos de su laberinto mental. Quería ocultar estos pensamientos, y olvidarlos de una vez, pero solo podía pensar que no tenia el suficiente valor y fuerza para vencerlos. La soledad la abrazaba tan fuerte que no la dejaba respirar, sentía el frío aliento del miedo en su nuca.
Necesitaba apoyo, una mano que la sujetara, y sinceramente, lo pidió a Él.
Con la mirada nublada, buscó sus ojos, no hicieron falta palabras de labios temblorosos.. “ayúdame por favor..” una lágrima le hizo llegar el mensaje.

Él, la cogió de la mano, y la llevó con seguridad, y un cierto halo de proteccionismo hasta un parque cercano. Debajo de un árbol, cobijados bajo su sombra y el frescor del agua pulverizada que una fuente cercana les regalaba, le ofreció su hombro y un lugar reservado del banco justo al lado de su cuerpo. Ella aliviada, ocupó su lugar. Sintió el frió metálico del banco en la piel, y el calor de sus palabras, y un suspiro liberó su alma.

Cerró los ojos. “Siente el mundo, olvídate de ti, de tu cuerpo, olvida lo que eres, y siente. Piensa QUIEN eres ..¿Escuchas? ¿No te resulta agradable el sonido del agua al caer?.. Los niños jugando ahí al lado.. Lo notas? El viento ha cambiado, ahora es mas fresco.”

Sus manos sostenían su cuerpo, aparentándolo contra el suyo con delicadeza. Acarició su pelo, que por el reciente y drástico corte, ahora tenia un tacto especialmente sedoso. Siguiendo el dibujo que los irregulares mechones dibujaban sobre su cuello, su mano, hábilmente se deslizó hasta acariciar sus hombros desnudos, en un recorrido imparable, dulce, y decidido a través de sus brazos, hasta sus manos, y sus caderas, donde se quedó por unos instantes. “No por favor!” ella lo pensó pero no dijo nada. En un segundo la tensión volvió a su garganta, asfixiándola de nuevo y amenazándola con nuevas lagrimas. Entonces sus miedos empezaron a tomar forma, su mano, comenzó a deslizarse tímidamente debajo de la tela de su camiseta de algodón, hasta encontrar su vientre. Ella, luchaba contra el deseo de apartar con un golpe sus manos entrometidas. Pero intentaba disfrutar del dulce sabor de aquella caricia. “¿eres feliz?” ella no respondió. –“¿y si vivieras en un mundo sin espejos?, serias mas feliz entonces?”. Ella abrió los ojos, se incorporó y se encontró con su mirada, intensa y calida. –“si eres feliz en este momento, en este lugar, y conmigo, olvídate del resto, y olvida que existen espejos..." su voz se hizo mas suave, un segundo de silencio.. "Te quiero” .Aquel te quiero, sonó a Te amo.

This page is powered by Blogger. Isn't yours?

Weblog Commenting by HaloScan.com